
La mitosis atípica se refiere a una división celular anormal. Normalmente, las células se dividen uniformemente mediante un proceso llamado mitosis, donde cada nueva célula recibe la misma cantidad de material genético (ADN). Sin embargo, a veces se producen errores durante este proceso, lo que provoca que las nuevas células reciban una cantidad desigual o anormal de ADN. Los patólogos describen estas divisiones anormales como «mitosis atípicas».
Identificar mitosis atípicas es importante porque a menudo indican que las células se dividen incorrectamente, lo cual puede indicar la presencia de una enfermedad, especialmente cáncer. Los patólogos buscan cuidadosamente mitosis atípicas al examinar muestras de tejido al microscopio, ya que su presencia ayuda a determinar si se está produciendo un crecimiento anormal y descontrolado, característico del cáncer, en el tejido.
Las mitosis atípicas se encuentran con mayor frecuencia en tejidos cancerosos, como cáncer de mama, cáncer de pulmón, cáncer de colon y melanoma. El tejido sano no suele presentar mitosis atípicas. Aunque es muy poco frecuente, ocasionalmente se observa mitosis atípica en tejidos dañados por radioterapia u otros tipos de lesiones.
La presencia de mitosis atípicas sugiere fuertemente la presencia de cáncer, pero no implica automáticamente su presencia. Los patólogos consideran las mitosis atípicas junto con otros hallazgos microscópicos y resultados de pruebas adicionales antes de confirmar un diagnóstico de cáncer. Las mitosis atípicas suelen plantear la sospecha de cáncer, pero siempre es necesaria una evaluación más exhaustiva para confirmar el diagnóstico.
Si se identifican mitosis atípicas, los patólogos suelen realizar pruebas adicionales, como la inmunohistoquímica (IHQ), para obtener más información sobre las células. La inmunohistoquímica utiliza tinciones especiales para identificar proteínas específicas, lo que ayuda a los patólogos a determinar el tipo y el origen de las células anormales. Estas pruebas ayudan a confirmar o descartar el diagnóstico de cáncer.
Cuando la mitosis atípica indica cáncer, las decisiones de tratamiento dependen del tipo de cáncer, su ubicación, estadio y el estado general de salud del paciente. Los médicos pueden recomendar diversos tratamientos, como cirugía, quimioterapia, radioterapia o terapia dirigida. La detección temprana de la mitosis atípica ayuda a garantizar un diagnóstico oportuno y preciso, lo que facilita una planificación eficaz del tratamiento.