Displasia escamosa es una condición precancerosa, lo que significa que las células afectadas no son cancerosas pero tienen el potencial de convertirse en cáncer con el tiempo si no se tratan. El término describe cambios en células escamosas, que son células planas que cubren la superficie de ciertos tejidos del cuerpo. Bajo el microscopio, estas células tienen un aspecto anormal y el grado de anormalidad puede ayudar a predecir el riesgo de progresión al cáncer.
La displasia escamosa suele ser causada por factores que irritan o dañan las células escamosas durante un período prolongado. Las causas más comunes incluyen:
La displasia escamosa puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo donde se encuentren células escamosas. Esto incluye:
Cada ubicación puede tener causas y riesgos únicos para desarrollar displasia escamosa.
Bajo el microscopio, la displasia escamosa afecta la epitelio, la fina capa de células escamosas que forma la superficie del tejido. Normalmente, las células escamosas están dispuestas en capas ordenadas y ordenadas. En la displasia escamosa, las células se desorganizan y comienzan a verse anormales. Pueden tener un aspecto más grande y oscuro. núcleos, formas irregulares y muestran signos de aumento de la división celular. A pesar de estos cambios, las células anormales permanecen confinadas en el epitelio y no invaden capas más profundas del tejido. Esta distinción es importante porque separa la displasia del cáncer.

No, la displasia escamosa no es cáncer. Sin embargo, es una afección precancerosa, lo que significa que las células anormales tienen el potencial de convertirse en un tipo de cáncer llamado carcinoma de células escamosas Con el tiempo, el riesgo de que esto ocurra depende de la gravedad de la displasia, que puede variar de leve a grave. La displasia leve suele desaparecer por sí sola, mientras que la displasia grave tiene una mayor probabilidad de progresar a cáncer si no se trata.
El tiempo que tarda la displasia escamosa en convertirse en cáncer varía según la gravedad de la displasia y otros factores como su salud general y si la causa subyacente (como Virus del Papiloma Humano (VPH, por sus siglas en inglés) Se aborda la infección o el tabaquismo). En algunos casos, la displasia grave puede progresar a cáncer en unos pocos años si no se trata, mientras que la displasia leve puede tardar más tiempo o no progresar nunca.
La sección pronóstico El tratamiento para una persona con displasia escamosa suele ser excelente, especialmente cuando se diagnostica y se trata de manera temprana. Los tratamientos pueden incluir la eliminación o el control de las células anormales y abordar la causa subyacente, como dejar de fumar o tratar una infección. El seguimiento regular con su médico es esencial para garantizar que la displasia no progrese a cáncer.